Arrecia la tormenta
Menguan las esperanzas
Barcaza acunada por olas rabiosas
Firme el timón
Impasible el capitán
Dispuesta la tripulación
No existe vacilación, lucha sin tregua, real, sin pérdida de ilusión...
La lluvia rompe en los rostros rigidos y grises de hombres despojados de toda esperanza..
Huele a muerte la mar
Sonrisa entre llantos
El cielo se estremece al grito del capitán
“Nunca pensé llegar vivo al infierno”
Rompen sus pulmones,
Maldiciendo al Dios del mar.
Golpe de timón
Golpe de timón
Lo siento pero hoy no me quedaré contigo a cenar...
He quedado... tengo una tripulación que salvar!
He quedado... tengo una tripulación que salvar!
